El trabajo del artista no termina nunca, nunca lo deja en paz. El artista no cierra su oficina y se olvida de su trabajo hasta la mañana siguiente.
Come, duerme, viaja, hace el amor y todo el tiempo en el fondo de su cabeza, el demonio le roe el cerebro.
Gian Carlo Menotti
30.1.09
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2 comentarios:
Hola. Una vez,Sapia lo invitò a la Pueyrredòn para que le hicieramos preguntas sobre el dibujo.Y por ahì se colò algùn consejo para la vida. Fuè una clase que todavìa ,con mis amigos de la clase, recordamos.Muchas gracias.Un abrazo.chau.
Siempre creí que el artista es un ser especialmente obsesivo, esto que menciona confirma mi teoría de que "la oficina" no cierra nunca. Saludos Luis.
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