Es que nos vamos gastando imperceptiblemente, uno a uno cada pelo cambia su color, se debilita, cae; la memoria se destiñe, los reflejos físicos o mentales se ponen lentos, los apetitos (sexuales y gastronómicos) se vuelven selectivos, antes me gustaban todas, hoy solo algunas.
Tal vez por eso dicen que la vida es una enfermedad mortal.
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1 comentario:
somos un cúmulo de mortandades que se pregunta todo el tiempo para desgracia de la carne mental.
(¿qué dije??)
como sea. lo dicho dicho está.
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