La poesía no nace. Está allí, al alcance de toda boca para ser doblada, repetida, citada total y textualmente. Usted, al despertarse esta mañana, vio cosas, aquí y allá, objetos por ejemplo. Sobre su mesa de luz digamos que vio una lámpara, una radio portátil, una taza azul. Vio cada cosa solitaria y vio su conjunto. Todo eso ya tenía nombre. Lo hubiera escrito así. ¿Necesitaba otro lenguaje, otra mano, otro par de ojos, otra flauta? No agregue. No distorsione. No cambie la música de lugar. Poesía es lo que se está viendo.
Señales de una causa personal, 1977
2 comentarios:
buenisimo, parece una serigrafia
es verdad, tal vez por los colores planos.
Un abrazo
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