Coincido con Marcial Souto que no hay etiqueta más espantosa que ciencia-ficción para cierto tipo de literatura. Paradójicamente bajo este rótulo están los textos más bellos, ingeniosos e intensos escritos por tipos que permanecieron al margen del canon literario (ese club de señoras educadas).
Fahrenheit 451-Tapa y contratapa- tinta acuarela y fuego sobre papel. |
2 comentarios:
Coincido entonces con Marcial Souto y con vos. Si tengo afición por la lectura es porque en sexto de primaria una profesora nos leía y hacía leer a Bradbury. El Hombre Ilustrado es una muestra cabal de lo que dices en el primer párrafo. Casi cuarenta años después, esos relatos siguen teniendo la fuerza y la poesía que tenían entonces.
Las ilustraciones son maravillosas. En nuestra casa de Madrid hay libros de Minotauro, algunos con tus portadas, que me traje de Buenos Airen cuando me vine. O cuando me fui.
Todo es muy extraño amigo Blanco, si te ponés a pensar, decís "me vine o me fui" y en realidad tu centro nunca se movió.
Un abrazo.
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