Pero esta noche de insomnio, después de haber deambulado por esas calles vacías en esa hora en que bandadas de gorriones cagan las veredas impecables, esa hora en que los maniquíes nos miran pasar desde sus vidrieras de neón, en esa hora acabo de descubrir que en mi ciudad natal, yo también soy un fantasma.
3.8.11
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2 comentarios:
La conjunción de cuadrito y texto quedó perfecta. Me pegó un piñón y no me recupero. Gracias por el arte.
Hola sudaca, me asombra eso que decis de la conjunción del cuadro y el texto, confirma una vez mas que el azar no existe. Otra coincidencia, también uno de mis platos especiales es el pastel de papas, un abrazo.
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