Quizás la respuesta esté en este párrafo de Carl G. Jung: “Es pequeña y oculta la entrada por la que se penetra al mundo; son innumerables los prejuicios, las suposiciones, las opiniones y los temores que se oponen a que se penetre en él. La gente quiere oir hablar de grandes problemas políticos y económicos, es decir, precisamente de aquellas cosas que siempre han empantanado a los pueblos. Nos parece grotesco de quien habla de puertas escondidas del sueño y de un mundo interior.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario