Michaela Pavlatova

Esta talentosa artista ilustradora y animadora, nació en Praga en 1961.
Estuvo en el festival de cine de Mar del Plata y entre otras cosas, en esa oportunidad dijo :“Fue agradable sentir que aquí la gente es capaz de expresar lo que siente.”
Este corto que te presento no lo pierdas, seguramente lo disfrutarás, y si sos fémina un poco más.

Fabio Morábito

Este dibujo aparece en el último ADN ,el suplemento cultural de La Nación.
Ilustra El huidor, un excelente cuento de Fabio Morábito, quien nació en Egipto, desde los tres años vivió en Italia y a los 15 emigró a México donde resolvió adoptar esa lengua para sus escritos.

Espacio publicitario

La calle

Es una calle larga y silenciosa.
Ando en tinieblas y tropiezo y caigo
Y me levanto y piso con pies ciegos
Las piedras mudas y las hojas secas
Y alguien detrás de mí también las pisa;
Si me detengo, se detiene;
Si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie.
Todo está oscuro y sin salida,
Y doy vueltas y vueltas en esquinas
Que dan siempre a la calle
Donde nadie me espera ni me sigue,
Donde yo sigo a un hombre que tropieza
Y se levanta y dice al verme: nadie.
Octavio Paz

Espacio publicitario

El tren fantasma

Todo artista tiene un repertorio de formas con las cuales, por oscuras razones, simpatiza y en el transcurso de su vida desarrolla.

Como dibujante, esto me sucede, aunque a lo largo del tiempo voy probando diferentes técnicas que me revelan nuevas posibilidades. Cuando dibujo con pluma y tinta o lo hago con un carbón o un lápiz, cada instrumento propone una diferencia a la cual trato de seguir, me dejo llevar.

Los cambios que se producen, a veces a pesar mío, aunque no lo parezcan son sutiles.
Alguna vez Walter Benjamín escribió: “En lo narrado queda el signo del narrador, como la huella de la mano del alfarero sobre la vasija de arcilla.”
Mal que nos pese, en todo lo que hacemos está nuestra huella, nuestro estilo, eso que seguramente no vemos porque somos parte de él.

Por añadidura, con todo ese material plástico elaboramos una idea, nuestra particular visión del mundo, como el caracol que construye su concha y sin saberlo es diferente a todas las que ya existían

El disparador de estos dibujos que hoy te muestro fueron unas postales que me regaló mi amiga la pianista Teresa Courrault, ella tiene una colección que eran de su abuelo.
Contemplaba esas mujercitas tan carnales, tan sensuales, y casi jugando con un lápiz fui dibujando una continuación de esas fotos, como una forma de collage.
Lentamente se fueron apilando en una caja.

Tiempo después, cuando con el editor Alejandro Crimi preparábamos un libro de dibujos se me ocurrió incluir una selección de esta serie a la que llamé Abracadabra.
El libro editado por Diógenes se llama “El tren fantasma” resultó una rareza, un compendio de esos dibujos que no estaba en mis planes publicar, una edición muy cuidada y hoy, lamentablemente, agotada.

No te olvides

Mi amiga se llamaba Graciela Santamaría, tenía 24 años, era una bella y pacífica estudiante de artes.
El 24 de marzo de 1976 Jorge Rafael Videla y sus secuaces tomaron por asalto el poder en Argentina. Secuestraron, torturaron, asesinaron y robaron con el silencio cómplice de muchos. No te olvides.
A Graciela la secuestraron las fuerzas de “seguridad” y la asesinaron.
“Obediencia debida” argumentan los asesinos hijos de puta que hoy pasean por las calles libremente.
“Obediencia debida” se llama este dibujo que publiqué hace años y hoy rescato como homenaje a mi amiga muerta junto con treinta mil desaparecidos.
No te olvides.

Obelisco

Pasajero en trance

¿De dónde vienen estas imágenes? ¿Qué significan? …a veces imagino que soy un viajero, un explorador que visita regiones olvidadas. Y con un extraño aparato fotográfico, documenta palmo a palmo lo que va descubriendo.

Probablemente alguna de estas caras que dibujo fueron un antepasado hace quinientos o mil años, tal vez esa bestia que pongo en el papel, fue la pesadilla de algún bisabuelo.

Porque así como heredamos rasgos: la nariz de mi abuelo, los ojos de un tío; así como
nuestros genes traen anotadas debilidades o inmunidades, así también accedemos a esos paisajes espirituales. Pero, ¿a quién puede interesarle algo tan íntimo como mis sueños?

Quizás la respuesta esté en este párrafo de Carl G. Jung: “Es pequeña y oculta la entrada por la que se penetra al mundo; son innumerables los prejuicios, las suposiciones, las opiniones y los temores que se oponen a que se penetre en él. La gente quiere oir hablar de grandes problemas políticos y económicos, es decir, precisamente de aquellas cosas que siempre han empantanado a los pueblos. Nos parece grotesco de quien habla de puertas escondidas del sueño y de un mundo interior.

Pero no me dirijo a naciones enteras sino únicamente a algunos hombres aislados, que dan por cosa sabida que nuestras realidades culturales no caen de las nubes, sino que son creadas, en última instancia, por los individuos, cuando las grandes cosas pierden su ruta es que se han perdido sus individuos, si es que yo no estoy en un error.”

Un tal Whitman

Las casas y las habitaciones están llenas de perfumes, los armarios están cargados de perfumes;
Aspiro su fragancia, la conozco y la gozo:
La esencia me embriagaría, pero no he de permitirlo.

La atmósfera no es un perfume, no tiene el gusto de la esencia, es inodora,
Ha sido destinada para mi boca desde la eternidad,
Estoy enamorado de ella;
Me iré al otero que está junto al bosque, me arrancaré el disfraz y me desnudaré,
Deseo con frenesí que la atmósfera toque mi cuerpo.

¿Has exagerado el valor de un millar de hectáreas?
¿Has exagerado el valor de la tierra?
¿Te has esforzado tanto en aprender a leer?
¿Te has vanagloriado de penetrar el significado de los poemas?
Acompáñame este día y esta noche y poseerás el origen de todos los poemas,
Poseerás lo bueno de la tierra y del sol (sobran millones de soles).
No aceptarás ya las cosas de segunda o tercera mano,
Ni verás con los ojos de los muertos,
Ni te nutrirás de los espectros de los libros,
Ni verás con mis ojos tampoco, ni aceptarás las cosas que yo he aceptado:
Escucharás todas las opiniones y las filtrarás a través de ti mismo.
Walt Whitman

Espacio publicitario

Afiche

Hace un par de años se inauguró en Mendoza el Mucha, llamado así en homenaje a Alphonse Mucha. Un proyecto en el que convergían desde un café concert , una pequeña sala de cine, una tienda de diseño y librería, y una gran sala de arte, además de talleres de todo tipo de expresión. En Mendoza conviven los bodegueros imperturbables, con las señoras que hacen brillar las veredas y unos pocos soñadores de utopías.
Lo inauguré con una muestra antológica donde junté a todos los artísticos que me habitan, desde el pequeño escultor al dibujante de humor o el ilustrador perezoso. Por primera vez reunidos, el cartel lo diseñó una talentosa amiga llamada Claudia Grebenc.

Afiche

Este afiche acompañó la muestra de dibujos sobre La metamorfosis. El diseño es de Sergio Perez Fernandez.

Afiche

Fue a comienzos de los ochenta cuando hice mi primera expo en Buenos Aires.
Dibujaba entonces en la revista Humor y fueron originales de dibujos publicados los que mostré.
La sorpresa vino cuando fui a levantar la muestra: ¡había vendido casi todo!

Afiche

Exhumando afiches, encuentro este, impreso en serigrafía, una técnica de reproducción muy económica. Exponía mis dibujos en un complejo cultural que convocaba teatro, sala de arte y editorial, se llamaba TNT .Duró hasta la dictadura de Videla ,la aniquilaron ni bien asumieron, en el imaginario militar cultura es izquierda.

Afiche

Tenía 23 años (yesterday) cuando hice mi primera expo de dibujos.
Este afiche que diseñé e imprimí en serigrafía es un sobreviviente que hoy rescato. Siempre pensé que un afiche responde a una circunstancia, debe llamar tu atención en la calle, un lugar inhóspito, y transmitirte el mensaje.

El tiempo pasa

El tema es la edad, el tiempo que pasa, los años. A veces los días se presentan como un todo coherente, es una constelación la que nos está determinando este momento.
Porque estos dibujos los tuve que hacer post cumple de mi vieja, son para el próximo ADN el suplemento cultural de La Nación.

Leiro dixit

Copiábamos una figura, una estatua pero con la memoria .La estatua estaba en un cuarto diferente a donde yo trabajaba; tenía que realizar la copia sin estar viéndola, de memoria…la memoria idealiza la forma, y cuando memorizas un cuerpo lo idealizas.
Hubo un tiempo en que me interesaron mucho la pintura y la escultura románicas. El arte románico también trabajaba con la memoria. Lo mismo ocurre con la escultura popular: desconoce la anatomía del cuerpo humano, no trabaja con modelos sino con la memoria del cuerpo.
Cabeza abajo (conversación con Francisco Leiro)
D.Cañas

Cumple

“El alma nace vieja y rejuvenece con el tiempo .Esa es la comedia de la vida. El cuerpo nace joven y con el tiempo envejece. Esa es la tragedia de la vida.”
Esto que alguna vez dijo Oscar Wilde cuadra perfectamente en mi madre que ayer cumplió sus primeros 86.

Rodeada de casi todos sus nietos y bisnietos festejamos con un suculento asado acá en Vistalba.

Mas tarde llegó la hora de los pasteles y tuve que hacer algunos retratos que debía a mis sobrinos.

Kubin al cubo

El ritmo de los trazos, arrojados con un impulso sobre el papel o esbozados con una ajustada precisión, varía de manera oscura e inexplicable, dándole así al dibujo esa marca única que nosotros sentimos como “personal”.Igual que en la escritura manuscrita, podemos decir aquí: cada mano que dibuja tiene su ritmo. En consecuencia, el ritmo ya tiene sus raíces en el don, y, la práctica, no hará mas que enriquecerlo en una u otra medida, hacerlo más flexible o más rígido, llegando a veces a crear un estilo. Como el pulso del hombre, el ritmo revela al iniciado muchas de las cualidades del alma del artista, porque encontramos también en él la secreta fuerza de atracción que empuja una hacia otra de las almas emparentadas. Las numerosas impresiones que han motivado todos los proyectos pasados del artista han dejado su huella en esa “escritura manuscrita”. El espectador lo presiente y su interés por la obra va en aumento.

Alfred Kubin
“El trabajo del dibujante”
Maldoror ediciones,2005

Espacio publicitario

El libro ilustrado

Uno de mis conflictos a la hora de ilustrar un libro era preguntarme: ¿acaso no está completo eso que el escritor concibió?, ¿puedo agregar algo a ese mundo autónomo que es un texto literario?, ¿una imagen, no adultera lo contado con palabras pulidas y precisas?

Estas preguntas corroían como un ácido, durante mucho tiempo, mi condición de ilustrador. Tal vez, esto me llevó a desarrollar un concepto de lo que significa un libro ilustrado.

Como olvidar a los precursores, aquellos monjes que iluminaban pequeñas viñetas en manuscritos medievales, algunas ilustraciones de Alberto Durero, pasando por el gran Hokusai hasta llegar a maestros como Gustavo Doré, Grandville, Alejandro Sirio, Alfred Kubin o N.C. Wyeth y en nuestra época Roberto Páez o Mattotti.

Aunque hoy siento que los nuevos ilustradores son los directores de cine. Pienso en Fellini y su inolvidable Satiricón, los hermanos Cohen trabajando con la Odisea, Tim Burton o Leonardo Favio.
De todos ellos me nutro, son probablemente mi mejor influencia.

Aunque todavía hay quien espera que el ilustrador transcriba fielmente en imágenes lo que el escritor cuenta con palabras.
Mis dibujos parten del polo opuesto, se inspiran en lo narrado, son una interpretación gráfica, amplifican el relato

Nadie es el mismo después de leer Crimen y castigo, El Quijote o La metamorfosis, son mundos que nos tocan y nos transforman.
Aunque no tengamos conciencia de ello, modifican nuestras zonas oscuras, son sueños colectivos que en algún punto nos alteran.

Por lo tanto, lo que dibujo también queda impregnado de esa sustancia. Después de leer los delirios de Poe, no puedo dejar de pensar en la muerte y mi trabajo gira (a pesar mío) en torno a ese tema. O un relato de Gógol abre la puerta a un ámbito desconocido…es eso lo que dibujo antes que la anécdota misma la cual es parte de lo literario.
“El mejor homenaje que podés hacerle a un escritor, es tomar su libertad a la hora de ilustrarlo”, decía mi viejo maestro Páez.

No minado

Cuando me llamaron de ALIJA, la semana pasada, para comunicarme que había sido nominado para el premio Andersen, me costó creerlo.
Es que a veces me siento un extraterrestre, metido en mis dibujos, todo sucede lejos.
El premio Hans Christian Andersen es el galardón mas importante que se otorga cada dos años a un ilustrador y a un autor.
Lo concede IBBY (international board on books for young people) y está patrocinado por la reina de Dinamarca.
Entre los premiados se cuentan Gunter Grass, Tomi Ungerer, Roberto Inocenti y otros próceres.
A este premio le dicen “el pequeño Nóbel.”
Por lo tanto entre mis conocidos acá en Vistalba pasé a ser un nominado al próximo Nóbel, esto conlleva invitaciones, agasajos, brindis, y la simpatía de mis vecinos para quienes dejé de ser el pintor para transformarme en “el premio Nóbel”.