El arte no es un fenómeno mecánicamente
progresivo, a la manera de la ciencia y la técnica industrial, que evolucionan
aritmética y geométricamente en el tiempo; el arte, repetimos, se manifiesta
por saltos y retrocesos, progresiones y contradicciones, por ser, en primer
término, reflejo del espíritu del hombre, de su sensibilidad y de sus
sentimientos. El arte, la literatura y la música son medios posibles de
registro del mundo interior que otras disciplinas no pueden explicar: lo eterno
del amor, el odio, la alegría, el dolor, el lirismo, la tragedia, la
melancolía, la tranquilidad o la ansiedad, remontados desde el gran abismo
secreto e infinito del ser y que sólo se puede intuir, y nunca totalmente por
medio de las expresiones habladas, musicales, formales o cromáticas.
Antonio Berni
Berni,
escritos y papeles privados- Temas Grupo Editorial
1 comentario:
Bueno... más retrocesos que saltos.
Publicar un comentario