“Me fui con Kafka a una exposición de pintura francesa en la galería del Graben. Había algunos cuadros de Picasso: bodegones cubistas y rosáceas mujeres de pies gigantescos.
“Es un arte distorsionista obstinado” dije yo.
“No estoy de acuerdo”, dijo Kafka. “Sólo registra la deformidad que todavía no se ha adentrado en nuestra conciencia. El arte es –a veces- un espejo, que marcha adelantado, como un reloj.”
Gustav Janouch, Conversaciones con Kafka.
19.7.10
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
2 comentarios:
¡Muy bueno! Brueghelesco, pero indudablemente moderno.
Puede ser Juan, tenés buena pupila, Brueghel es uno de mis viejos favoritos.
Publicar un comentario